Estudio de seguimiento a 5 años de las tentativas autolíticas atendidas en el área sanitaria del Vallés Occidental estecomparación de las características psicopatológicas con los suicidios consumados /

  1. PARRA URIBE, ISABEL
Dirigida por:
  1. Diego J. Palao Vidal Director/a
  2. Gemma Garcia Pares Codirector/a
  3. Hilario Blasco Fontecilla Codirector

Universidad de defensa: Universitat Autònoma de Barcelona

Fecha de defensa: 18 de septiembre de 2017

Tribunal:
  1. Pilar Alejandra Saiz Martínez Presidente/a
  2. N. Cardoner Secretario/a
  3. Mikel Urretavizcaya Sarachaga Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 477653 DIALNET lock_openDDD editor

Resumen

Introducción: A menudo se asume que las tentativas de suicidio y los suicidios consumados representan el mismo grupo de individuos pero evaluados en diferentes momentos de la “carrera” suicida. Sin embargo, existen indicios de que se trata de dos poblaciones diferenciadas. Esto implica que las estrategias preventivas más centradas en los intentos de suicidio, podrían no ser suficientes para prevenir el suicidio consumado. Por otro lado, sabemos que solo una proporción pequeña de aquellas personas que presentan tentativas acabaran consumando el suicidio. El tipificar mejor la población de personas que presentan riesgo de suicidio permitiría iniciar estrategias preventivas más eficaces. Objetivos: Comparar las características sociodemográficas y clínicas entre una población que ha realizado intentos de suicidio y otra de suicidios consumados, y el seguimiento de las conductas suicidas durante un periodo de 5 años para identificar mejor a la población con mayor riesgo de reintentar o consumar el suicidio. Metodología: Se seleccionaron todos los casos de tentativas autolíticas atendidas en el servicio de urgencias del Hospital Parc Taulí de Sabadell durante un año natural. La información se obtuvo a partir de la información registrada en la historia clínica hospitalaria, de primaria y de los informes clínicos de urgencias. También, se evaluaron todos los suicidios consumados durante un periodo de 3 años, recabando la información facilitada por el forense. Para la realización de la segunda parte del proyecto se mantuvo el registro de todas las tentativas autolíticas atendidas en el servicio de urgencias y de todos los suicidios consumados cometidos desde el 1 de enero de 2008 hasta el 31 de diciembre de 2012. Dentro del programa EAAD (European Alliance Against Depression) del que nuestro hospital forma parte, y como medida preventiva para evitar los reintentos, se realizó un seguimiento telefónico durante 1 año a todas las personas atendidas en urgencias tras realizar una tentativa autolítica, con la finalidad de mejorar la atención a esta población de riesgo y reducir la probabilidad de recurrencia. Resultados: Los factores de riesgo para el suicidio consumado fueron el sexo masculino, una mayor edad, la inactividad laboral, estar viudo y vivir solo, el diagnóstico de trastorno depresivo mayor, y el consumo de alcohol. A pesar de presentar un perfil de mayor gravedad social y clínica, los sujetos que consumaron el suicidio no recibieron tan frecuentemente seguimiento por los servicios de Salud Mental. En cuanto el seguimiento a 5 años, se observó que una menor edad, los trastornos de personalidad y por abuso o dependencia a alcohol son factores de riesgo para repetir la tentativa, mientras que los problemas de alcohol y una mayor edad lo son para acabar consumando el suicidio. Además el programa de seguimiento telefónico fue útil para reducir los reintentos el primer año y el riesgo de consumar el suicidio, aunque la mayoría de los casos de suicidio consumado no pudieron incluirse en el programa. Es decir, la mayoría de los suicidios se produjeron al primer intento, limitando así la función preventiva del programa para el suicidio consumado. Conclusiones: Los suicidios consumados y los intentos de suicidio parecen ser dos poblaciones suicidas diferentes. Las personas que mueren por suicidio tienen un contacto mayor con los servicios de atención primaria, lo que debe ser considerado a la hora de poner en marcha medidas preventivas. La atención de los trastornos depresivos y por consumo de alcohol deben ser una prioridad para reducir las tasas de suicidio consumado. La actuación sobre las personas que han realizado tentativas es una importante estrategia preventiva que reduce los reintentos pero las estrategias preventivas no deben limitarse únicamente a esta población de riesgo.