Narrativa fotográfica de la época del terrorismo en el Perúcomparativa de la exposición fotográfica "yuyanapaq. Para recordar" con el diario de marka y la revista caretas. Casos uchuraccay y lucanamarca (1983 - 1986)

  1. VALLEJO MORENO, JOAQUIN ANTONIO
Supervised by:
  1. Mercedes Román Portas Director

Defence university: Universidade de Vigo

Fecha de defensa: 01 March 2019

Committee:
  1. Aurora García González Chair
  2. Erika Fernández Gómez Secretary
  3. Jorge Pedro Sousa Committee member

Type: Thesis

Abstract

Luego de la cruenta etapa de violencia política y terrorismo que sufrió el Perú entre los años 1980 al 2000 este país, el estado y los ciudadanos en general, se ven con la imperiosa necesidad de estudiar, analizar y entender por qué pasó esta cruenta etapa, sus consecuencias para la sociedad y la manera en no volver a repetir dicha época de terror, es ahí, bajo esa necesidad, que nace la Comisión de la verdad y reconciliación (CVR) y paralelo a ello se crea un relato visual de los 20 años de terrorismo en el Perú llamado Yuyanapaq. Para recordar. Yuyanapaq utiliza a la fotografía como una herramienta de recuerdo y creación de memoria, la fotografía de por sí es un elemento importante en la narración visual por la representatividad de lo que se fotografía. Se tiene que tener en cuenta que existen muchos tipos de narrativa visual sobre cualquier tema de acuerdo a la ideología política o punto de vista que le quieran dar los fotógrafos, los medios donde salen publicadas las fotografías o las diferentes exposiciones fotográficas donde se puedan exhibir las imágenes. Caretas (revista) y El Diario de Marka* (periódico) son dos medios de comunicación escritos que utilizaron la fotografía periodística para mostrar, de manera visual, el punto de vista de dos medios antagónicos en lo que se refiere a ideología política para plasmar el punto de vista sobre dos hechos cruentos en estos 20 años de terrorismo en el Perú, la matanza de Uchuraccay y la matanza de Lucanamarca. Este trabajo académico se centra en la diversificación de narrativas visuales que se pueden dar sobre dos hechos trágicos para la historia del Perú, utilizando a la fotografía como vehículo visual del punto de vista ideológico de dos medios de comunicación antagónicos políticamente hablando en comparativa con la narrativa visual del estado, representado por la exposición Yuyanapaq. para recordar. La fotografía, gracias a la naturaleza moldeable de este elemento comunicacional, es utilizada como un conducto para mostrar el punto de vista que se quiere dar sobre un hecho en concreto, la imagen surge como un elemento complementario y necesario para graficar las posiciones en pleno conflicto; ambos medios de comunicación utilizan a la fotografía como elemento sustancial para posicionar la visión que tienen sobre las dos matanzas que se analizan en esta tesis doctoral. Por otro lado Yuyanapaq. Para recordar se nutre, no en todos los casos que presenta, de la fotografía periodística para crear su propia narrativa visual de esa época pero en otro contexto y con objetivos claros en el sentido de crear memoria social mostrando imágenes de las víctimas con el fin de crear conciencia y memoria social sobre este fenómeno nefasto que enlutó al Perú. En este sentido Yuyanapaq utiliza a la fotografía como una herramienta para evocar la terrible época de violencia política que asoló al Perú pero sobre todo para dar visibilidad a los más pobres y quechua hablantes, sector de la población peruana más afectado en esa época. La creación de narrativas visuales se da también en base a las diferentes percepciones que nos pueda dar la fotografía como herramienta comunicacional, es decir, que las imágenes que se muestran en esta tesis doctoral son fotografías publicadas que pasaron por una selección de interpretación, percepción y elección para poder formar parte de un mensaje, parte de un discurso político representado en la línea editorial de los medios elegidos en este trabajo, así como en el de la exposición fotográfica. * El Diario de Marka dejó de circular en 1988, para esa época salía con el nombre de El Diario y no tenía nada que ver con El Diario de Marka ya que se había vuelto el vocero oficial de Sendero Luminoso.