Retrato robot del perfil geográfico de la delincuencia juvenilUn análisis de la movilidad criminal en la ciudad de Albacete
- Fernández Molina, Esther
- Vázquez Morales, David
- Planells Struse, Simón
- Belmonte Mancebo, Mario
- Zaragozí Zaragozí, Benito (dir. congr.)
- Ramón Morte, Alfredo (dir. congr.)
Verlag: Universidad de Alicante / Universitat d'Alacant ; Grupo de Tecnologías de la Información Geográfica ; Asociación Española de Geografía
ISBN: 978-84-940784-4-6, 84-940784-4-5
Datum der Publikation: 2014
Seiten: 702-710
Kongress: Congreso Nacional de Tecnologías de Información Geográfica (16. 2014. Alicante)
Art: Konferenz-Beitrag
Zusammenfassung
En la actualidad todas las disciplinas que abordan el estudio de la delincuencia reconocen que la comprensión del fenómeno delictivo mejora si se tiene en cuenta el componente espacial o geográfico. Los ambientes han mostrado poseer ciertas características que fomentan o facilitan el delito, y los delincuentes gravitan en torno a aquellos ambientes vulnerables o lucrativos. En este sentido, gran parte de la literatura científica enmarcada en la categoría de criminología ambiental se ha consagrado a estudiar la existencia de patrones en el desplazamiento de los delincuentes en la búsqueda de objetivos. Un hallazgo compartido por la mayoría de investigaciones es que, por lo general, los individuos responden al principio del mínimo esfuerzo y se desplazan distancias relativamente cortas para cometer delitos. No obstante, se han documentado que dicha distancia es dependiente de otros factores como la naturaleza del hecho delictivo, la franja horaria, la relación víctima-victimario, el valor del bien deseado, etc. En el caso de la delincuencia juvenil, la evidencia empírica apunta a una menor movilidad criminal que en el caso de los adultos. A pesar de ello, en España no se ha realizado estudios que apoyen esta afirmación. Por ello, el objetivo de presente trabajo se dirige a conocer si los viajes sirven a algún propósito útil para los delincuentes juveniles, es decir, que les mueve a desplazarse. Para tratar de dar respuesta a esta pregunta, se ha analizado la relación entre distancia de decaimiento y algunas características del delito. Los resultados obtenidos han evidenciado que, por lo general, los delincuentes juveniles cometen los delitos en un entorno cercano, durante el desarrollo de otras actividades cotidianas no delictivas. Así, parecería confirmarse la idea de que el delito surge más bien como una oportunidad, en medio de las actividades normales de los jóvenes, en dónde existe algún elemento que funciona como precipitador de la conducta delictiva.