La influencia de John Henry Newman en la reflexión educativa del último medio siglo

  1. LUQUE MENGIBAR, DAVID
Dirigida por:
  1. José Antonio Ibáñez-Martín Director
  2. David Reyero Director/a

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 08 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Rogelio Rovira Madrid Presidente/a
  2. Fernando Gil Cantero Secretario/a
  3. Victoria Vázquez Verdera Vocal
  4. Miguel García-Baró López Vocal
  5. Emanuele Balduzzi Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La influencia de John Henry Newman en la reflexión educativa del último medio siglo pretende demostrar que el núcleo de la teoría educativa newmaniana constituye el referente a partir del cual es posible comprender la forma en que lo educativo está siendo pensado en la actualidad, en un contexto preferentemente cristiano. Para ello, esta investigación proporciona una línea interpretativa que se aleja de la tradición hermenéutica que se ha seguido en la filosofía educativa newmaniana. En lugar de leer esta intentando explicar los discursos en relación a la biografía de Newman, o en contraste con la suerte de su institución, o los textos en sí mismos, sitúa los argumentos educativos en relación con los de otras obras del opus newmaniano. Este modo de proceder permite trazar la influencia de John Henry Newman en la reflexión educativa actual, que se concreta en tres autores: Joseph Ratzinger, Alasdair MacIntyre y Bernard Lonergan. Lo que une a este grupo de intelectuales tan heterogéneo es que reconocieron públicamente una deuda intelectual con Newman, que este condicionó algunos aspectos de su pensamiento y que desarrollaron un conjunto de reflexiones relevantes para la educación en las que Newman terminaba apareciendo, indefectiblemente. No obstante, para conocer esto último con precisión, y dado que a estos autores también les une el hecho de que escribieron sobre educación sólo accidentalmente, esta investigación ofrece una reconstrucción orgánica del pensamiento educativo de cada uno de ellos a la luz de los elementos principales de sus pensamientos. De esta manera, vistas sus reflexiones educativas desde una perspectiva sistemática, es posible conocer los argumentos concretos en que Newman está pretense y, por lo tanto, calibrar la intensidad de su influencia. Esta última se podría medir, así, en dos dimensiones. Una primera, en la que se vería que los elementos de los discursos de Dublín que los autores han tomado para componer sus reflexiones sobre la educación, de forma unánime, son la apología de la teología y el fin de la universidad como la formación de un hábito filosófico de la mente. Pero, además, dado que se adopta una opción hermenéutica distinta a la tradicional, en la que, como dije, se lee la Idea en relación a las obras completas del cardenal, se podría deducir un conjunto de influencias más amplio. Estas demuestran que si bien la Idea no está presente en las particularidades específicas de cada una de las reflexiones educativas de Ratzinger, MacIntyre y Lonergan, sí lo está Newman a través de otras de sus obras. Lo que permite deducir, de un modo mucho más conclusivo, que John Henry Newman influye en el pensamiento educativo más reciente de un modo muy intenso. No obstante, la investigación termina, más que con unas conclusiones, con un capítulo conclusivo donde se ofrece una alternativa a la discusión sobre las posibilidades de llevar a la práctica la filosofía educativa newmaniana. Aquí, cuando prácticamente toda la crítica académica ha coincidido en señalar que los discursos de Newman son, más bien, una utopía que difícilmente se podría encarnar en una institución física, se propone una relectura de los términos en que habría que pensar esto último. Se defiende, más específicamente, que dado que Newman es la personalidad más influyente en el documento Ex Corde Ecclesiae, que regula la fisonomía que deben tener todas las universidades eclesiásticas de la Iglesia Católica, la practicidad de su filosofía educativa reside, precisamente, en que fue escrita en términos netamente gnoseológicos.